El sol es la principal fuente de energía radiante que disfrutamos a diario. La luz infrarroja proveniente del sol es una fuerza importante que promueve la salud, produciendo un aumento en los glóbulos blancos, lo que equivale a una mayor inmunidad, una buena salud y mejor calidad de vida.

El Sauna IR utiliza este calor y las  ondas alcanzan el cuerpo directamente sin necesidad de calentar el aire al interior del sauna. 

Los rayos se difunden a través de un calentador eléctrico, sin representar ninguna clase de peligro para el organismo, como si  es el caso de los rayos ultra violeta. La energía que desprenden los rayos infrarrojos penetra en el cuerpo humano hasta 4 cm de profundidad a fin de estimular los tejidos. Este efecto calorífico penetra profundamente en los tejidos musculares y los órganos interiores y la respuesta es un aumento del volumen  de sangre que llega al corazón. Esta tensión del corazón es muy beneficiosa y se asemeja a un entrenamiento cardiovascular.  En una sesión de 30 minutos de sauna IR se pueden quemar hasta 600 calorías.

Dentro de los beneficios del Sauna IR están el alivio del dolor, desintoxicación, estímulo de la circulación, reducción del estrés, cansancio y fatiga crónica.